El precio de los combustibles
El Gobierno define el futuro de un impuesto que podría impactar en una nueva suba en los surtidores
En febrero vence el congelamiento del impuesto a los combustibles vigente desde mediados de 2021. Podría impactar entre el 10% y 12% en el precio de las naftas y gasoil.
El Ministerio de Economía tiene en estudio una actualización de los impuestos al combustible líquido y al dióxido de carbono que están sin revisión desde hace dos años y medio.
En realidad aún no hay nada definido, y desde el Poder Ejecutivo Nacional no se dio ninguna información oficial, aunque trascendió que la medida busca reducir el déficit fiscal.
Lo que sí es cierto es que el Decreto 567 de octubre 2023 estableció que los ajustes desde el tercer trimestre del 2021 al tercer trimestre del 2023 se hará efectivo a partir del 1 de febrero de 2024.
Es decir que si el PEN no resuelve nada, la AFIP, de oficio, debe incrementar estos dos impuestos. "O sea para que no aumenten debe haber un decreto que prorrogue. Si hubiere tal incremento se informaran a la petroleras y las facturación tendrá cargada dicho aumento impositivo", afirmaron desde el sector.
Del lado de los estacioneros señalaron que posiblemente eso impacte en el precio del surtidor entre 10% y 12 %. En definitiva se barajan varios escenarios en el contexto actual: que el Gobierno Nacional extienda la prórroga, que se aplique el incremento automáticamente vencido el plazo, o que el Gobierno decrete un incremento parcial.
"Creo que lo más conveniente es que incremente ahora hasta cumplimentar lo que dice el decreto o sea hasta el tercer trimestre del 2023, pues si lo prorroga hasta marzo, se va a encontrar con el cuarto trimestre del 2023 donde solo diciembre tuvo una inflación del 25,5 %. O finalmente que el Ejecutivo piense alguna fórmula distinta que nada tenga que ver con este modelo de ajuste", reveló una fuente de la industria
Ante el retiro del capítulo fiscal de la ley ómnibus, el Gobierno busca distintas alternativas para financiar la pérdida que implicará para el fisco no contar con esos recursos y en ese sentido los combustibles surgen como una opción.
La Ley 27.430 estipula un aumento trimestral del impuesto según el IPC del Indec, pero por distintos motivos la actualización se fue posponiendo. De hecho, el Gobierno no necesitaría pasar por el Congreso ni firmar ningún decreto para incrementar el impuesto a los combustibles líquidos.
En el último mes los combustibles aumentaron 121% promedio. La suba estaría dada por cuatro aspectos clave: el avance del tipo de cambio oficial, el incremento de los biocombustibles, el atraso de los impuestos a los combustibles, y el valor del barril de petróleo que cobran las refinadoras.
