Estacioneros en alerta: "No queremos mayor aumento de precios porque repercute en las ventas"

Las más de 5.260 estaciones de servicio distribuidas en todo el país están atravesando en los últimos meses lo que podría definirse como una tormenta perfecta que atenta contra la sustentabilidad del negocio. Si bien durante años se manifestaron a favor de la liberalización del mercado, la coyuntura sectorial asociada a una macroeconomía en retracción están haciendo sentir su impacto en las cuentas de los surtidores.

Marcelo Pirri, presidente de la Cámara de Expendedores de Combustibles de Neuquén y Río Negro, explicó diálogo con Mejor de Tarde por AM550 que el sector está atavesando "un panorama a nivel país que es desolador, porque hay zonas donde han perdido hasta un 50% de ventas, en particular las regiones transfronterizas de Jujuy, Salta y Misiones, donde tenían afluencia de extranjeros a cargar combustible".

En Neuquén, por su cercanía a Chile también está experimentando el fenómeno de una manera atenuada de diciembre a febrero por la afluencia turística, pero en lo que va de marzo empieza a asemejarse a lo que se "se está percibiendo a nivel nacional con una retracción de 40% o 45% en la nafta premium".

Ante ese panorama que no tiene muchos indicios de poder ser revertido en el corto plazo, irri fue categórico: "No queremos mayor aumento de precios porque sabemos que están caídos los bolsillos de los consumidores y que eso repercute en una mayor caída de ventas".

Es que las estaciones de servicio, en su mayoría pymes, están afrontando una caída estimada en el 16% en volumen desde diciembre a febrero en la sumatoria de todos los combustibles líquidos por el impacto del aumento de precios estimado en torno al 150%. Pero a eso se suma no sólo la dinámica propia del sector que busca acercarse a los precios de paridad internacional sino la abrupta caída del poder adquisitivo de los salarios que provocó un menor uso de los vehículos, en algunos casos, y en otros un corrimiento de productos premium a otros más económicos.

Pero a este panorama, se esta sumando que, con los precios previos a los aumentos, el canal minorista tenía un mayor consumo por la migración de los consumidores mayoristas (agro, consumo transporte de carga y pasajeros) que se volcaban a las estaciones de servicio por su menor precio, pero que desde fines de diciembre están retornando a sus proveedores a granel habituales.

Más allá de la política de aumento de precios que puedan asumir las petroleras, para los próximos meses explicó Pirri ya está definido el sendero de recuperación del atraso impositivo sobre los combustibles.

"Estamos esperando para abril y mayo -dijo el dirigente empresario- el último coletazo de los aumentos impositivos que habían sido resignados por el gobierno anterior durante dos años y medio. Así que sabemos que va a haber un reacomodamiento de precios también de lo que refiere al costo del producto". Y en junio se dará el empalme con la lógica trimestral de actualización de los impuestos a los combustibles en base al Índice de Precios al Consumidor.

El titular de la Cámara de Expendedores regional también alertó sobre el incremento de los costos fijos en un contexto de alta inflación y actualización de pauta salariales -que según lo acordado con el gremio seguirá el ritmo de la inflación minorista-, servicios técnicos, insumos, seguros, impuestos y en particular las tarifas de la energía eléctrica que "este último mes fue terrorífico" y que requiere "un entendimiento de las petroleras para poder paliar esta situación".

El incremento en el costo de la energía eléctrica que para las estaciones de servicio significa en el orden del 170%, se magnifica en el caso de las estaciones duales, que requieren mayor energía eléctrica para los compresores de gas, las que deben afrontar costos de energía superiores a los 5 millones de pesos, por lo que se está evaluando el desarrollo de paneles solares, los costos asociados y las ventajas que ello representaría.

Pirri también fue consultado sobre el proyecto para avanzar en Neuquén con la aplicación de una tasa adicional a la venta de combustibles para suplantar la quita de subsidios del Fondo Compensador del Transporte que dejaron de percibir todas las provincias en febrero. "Esa iniciativa no está reglamentada, pero mantenemos nuestra posición en desacuerdo", afirmó.

"Judicialmente es muy difícil poder actuar porque no somos los perjudicados directos y la tasa la termina pagando el consumidor. Entonces, no estamos legitimados como Cámara para hacer algún planteo judicial pero si cualquier entidad que represente a los consumidores podrá hacer los planteos necesarios ante ante la justicia en caso de que esto se lleve a cabo", afirmó el directivo.

El avance de esta recaudación por parte de diversos municipios -que el sector denomina genéricamente Tasa Vial- resulta perjudicial a las estaciones de servicio, porque aseguran ocasiona mayores cargos administrativos al tener que afectar recursos para percibir y liquidar para el fisco municipal. Mayores responsabilidades en el control y percepción de las mismas, convirtiéndolas en meros recaudadores municipales. Además, explican, desincentiva aún más la venta de combustibles, en una coyuntura de alta inflación y el aumento del costo para los clientes, y genera asimetrías de precios entre estaciones de distintos municipios, haciéndolas menos competitivas y desestimulando la capacidad para reinvertir.