Panorama político de Vaca Muerta

Vaca Muerta: apuntes en la recta final de la doble transición política

En Neuquén, el MPN le da su respaldo a Figueroa antes de la asunción como gobernador. A nivel nacional, Milei confirmó su equipo energético, en una semana con récord e interrogantes sobre la infraestructura.

Vaca Muerta: apuntes en la recta final de la doble transición política
Un equipo de torre en Vaca Muerta.
Un equipo de torre en Vaca Muerta.

Vaca Muerta, la panacea de las contradicciones, quedó en medio de la velocidad crucero de la doble transición. La montaña rusa emocional y política previa al balotaje siguió con las primeras cartas sobre la mesa en la próxima gestión nacional. Se empiezan a conocer los nombres del área energética del gobierno del presidente electo Javier Milei. Como siempre en la última década, cobrarán verdadero sentido según el tipo de macroeconomía -y la voluntad política imperante- en Argentina.

En Neuquén, donde hace meses tiene lugar una transición entre gobiernos, camino a la asunción del gobernador electo Rolando Figueroa, se destacan los respaldos explícitos del MPN al próximo mandatario; también, los puentes que empiezan a tenderse a la próxima gestión nacional, y los interrogantes sobre las condiciones para el desarrollo de los recursos no convencionales, que representarán el 40% de los ingresos del presupuesto del 2024.

En una semana con una aceleración adicional en el tablero político, se destacan algunos puntos salientes en la recta final al 10 de diciembre:

 

La Libertad Avanza y el clamor del MPN

Figueroa tuvo un respaldo contundente esta semana. Cerca de mil militantes del MPN, intendentes, diputados electos y referentes de la actual conducción partidaria, se congregaron para poner en escena su apoyo en la previa de la asunción. El gobernador electo, que dio la pelea con un sello propio, sigue acumulando también dentro del partido que lo vio nacer. Había ocurrido en la elección de abril pasado. El histórico resultado de entonces también se explica por las profundas disidencias internas de la militancia con la conducción, al margen de lo fundamental: las estructuras partidarias estallando por el aire en la foto de este tiempo y el voto por el cambio, que en este caso fue contra una hegemonía de más de 60 años y la falta de respuestas, en la face actual, para una porción significativa de la sociedad a la que no le llega la bonanza del sector energético. El mismo 40 por ciento de la pobreza de Argentina tiene correlato a nivel provincial. En abril Figueroa plasmó su victoria con apoyos a uno y otro lado de la grieta del PJ y JxC, por solo mencionar dos porciones del poder político que sumó. Desde entonces, obtuvo adhesiones de casi todo el espectro político. El acto de Cutral Co del jueves mostró todo el caudal de respaldos que terminó cosechando a días de iniciar su gobierno. Es la sumatoria de su brazo político Comunidad-Neuquinizate y de buena parte del MPN, que desde hace meses lee hacia donde se desliza el eje de la conducción provincial. Ese apoyo implica un importante punto de partida ante la nebulosa nacional dada por una fulminante crisis económica, en un escenario que reserva interrogantes en el modo de relacionamiento del nuevo presidente con las provincias. También Milei se impuso en Neuquén con mucha claridad, en los test electorales previos.

“Es momento de establecer acuerdos, porque las transformaciones se hacen con políticas de Estado para la gente. Mi compromiso es apoyar y trabajar junto a cada uno de los intendentes de la provincia”, dijo el próximo gobernador.

Figueroa habló del rol fundamental del Movimiento de Acción Política (MAPO), una corriente interna del partido neuquino que apoyó su candidatura en la previa de las elecciones. “El MAPO fue clave en el nacimiento de nuestro espacio. Muchos compañeros del partido desde el primer día forman parte de nuestro frente #Neuquinizate, porque estamos convencidos que abrir los brazos es la manera de construir una propuesta superadora para Neuquén”, dijo en sus redes sociales.

 

Pereyra, los consensos y la interna del MPN

Guillermo Pereyra dirigió el gremio petrolero durante casi 40 años y dio el salto a CATHEDA, la entidad que agrupa a buena parte de los sindicatos energéticos de Argentina. Es una de las voces trascendentes dentro de la interna del MPN, un rol que construyó desde la entidad que hoy conduce Marcelo Rucci con una injerencia determinante en los bloques de Vaca Muerta y la Cuenca Neuquina, en la que representa a unos 35 mil afiliados. Tras la derrota de Sergio Massa del domingo pasado, Pereyra habló de dos temas centrales en el contexto político del mundo shale. Por un lado, el escenario previo antes de la asunción de Milei, con los petroleros jugando con el candidato oficialista. Evaluó que “la gente votó cambios, perdimos”. Se mostró predispuesto a “acompañar para que (el presidente electo) pueda desarrollar su actividad desde el punto de partida”. Y agregó, respecto de la agenda energética, cuyo tratamiento avizoró como resorte del Congreso, que CATHEDA dará su posición en comisiones de Diputados y el Senado. Es la mirada que se desprende del posible tratamiento de reformas estructurales que impulsa la gestión nacional entrante.

Dijo, también, que “paralizar la obra pública puede traer muchos problemas” y que por ahora la posición de la entidad es “confrontar ideas y proyectos”. Añadió que la posibilidad de privatizar YPF “necesita de un amplio consenso” y que “es imposible para cualquier actor político hacerlo individualmente”.

El referente sindical también habló de la coyuntura interna del partido provincial. La semana previa, el sector Azul y Blanco, que conduce Rucci, había pedido renuncias y una convocatoria a elecciones. El partido está presidido por el gobernador Omar Gutiérrez; Jorge Sapag lidera un estamento clave, la Convención. “Hay que reconstruir nuestro espacio, y trabajar en un partido de unidad, donde no confrontemos, y veamos la forma de hacer política. Dejaremos pasar las fiestas y haremos reuniones, hay que hablar y empezar a despegar”, expresó Pereyra. Sostuvo que el MPN le debe abrir las puertas a “todos los que se fueron, no solo al compañero Rolando Figueroa, sino que también a (el ex dos veces gobernador) Jorge Sobisch. Y a partir de eso reconstruir la unidad, empezar con una nueva generación, que se haga cargo de la conducción partidaria”.

 

Nadia Márquez y el tándem Neuquén-Nación

 Nadia Márquez es electa diputada nacional por Arriba Neuquén, el brazo local de la Libertad Avanza. Llegará al Congreso con el 35,6 por ciento de los votos; es la postulante más votada en ese segmento. Pudo capitalizar el voto a favor de Milei y de los sectores locales que la respaldaron, entre ellos el evangélico. Es también parte del esquema partidario que llevó a Figueroa a la Gobernación. En un diálogo con AM550, fijó su postura sobre las declaraciones y el pronunciamiento del propio Milei y su entorno sobre la privatización de YPF. "No tenemos que tener miedo a si algo es privado o público. Lo importante es evaluar si es rentable o no, y si su funcionamiento es el adecuado, y qué es lo mejor para el país. El rol del Estado debería ser el de acompañar y promover la iniciativa privada y ocuparse de las áreas de salud, seguridad y educación", dijo Márquez. 

Señaló que no fue un problema que Figueroa respaldara a Massa en la etapa previa. “Nunca fue un inconveniente. Neuquinizate pudo superar las diferencias en la provincia que no nos permitían tener una propuesta electoral votable, con energía, fuerza y equipos. Y que hacían que no logremos la alternancia en la provincia de Neuquén”. Expresó que dentro del nuevo frente político sabían con antelación que no tendrían “la misma visión a nivel nacional”. “No vamos a tener inconvenientes en la relación entre la provincia y la Nación”, afirmó la electa diputada quien comenzó a ser una suerte de enlace con el próximo ministro del Interior, Guillermo Francos, con quien ya piensan el esquema de los organismos nacionales en la provincia de Neuquén.

 

Nuevos nombres, récord y la infraestructura como interrogante

Rápidamente el gobierno nacional entrante se ocupo de confirmar y adelantar los nombres para los cargos estratégicos del sector energético. Eduardo Rodríguez Chirillo ya encabeza la transición desde la secretaría de Energía. Junto a sus equipos, mantuvo un primer encuentro oficial con la actual encargada del área, Flavia Royón. Horacio Marín, como ya se adelantó, será presidente y CEO de YPF, la empresa controlada por el Estado nacional que el futuro gobierno quiere privatizar. Es una de las claves centrales de la economía de Argentina, tal como viene ocurriendo en la última década, en la que puso en el escenario mundial los no convencionales de Neuquén. Marín es uno de los artífices del desarrollo del shale gas de Vaca Muerta, desde Tecpetrol, el brazo petrolero del Grupo Techint, que en el último año alcanzó su mayor marca histórica de producción, en el bloque Fortín de Piedra, con 24 millones de metros cúbicos diarios en el invierno, en coincidencia con el pico de la demanda invernal de 100 MMm3/d en Neuquén, tras la habilitación del gasoducto Néstor Kirchner en su primera etapa. Sobre el futuro de corto y mediano plazo, queda por ver qué ocurrirá con los procesos licitatorios y de adjudicación de obras para dos tendidos fundamentales. La etapa dos del GPNK, entre Salliqueló y San Jerónimo y la reversión del Gasoducto Norte, cuya adjudicación fue suspendida en medio de la transición. Esto implica no conocer todavía qué tipo de suministro de gas tendrán millones de argentinos del norte del país en el invierno del 2024. En plena caída de la producción de Bolivia, la reversión del sistema de gasoductos es una nueva puerta de salida para el gas de Vaca Muerta y le permitiría al Estado un ahorro significativo en importaciones de combustibles.  

Otra postal de la ambigüedad está dada por el nuevo récord de producción en la provincia de Neuquén. Octubre llegó con la mayor marca histórica en 105 años, con los 354.156 barriles por día en promedio. Al mismo tiempo, a la espera de definiciones estratégicas, la contraparte local de la UOCRA anticipa parálisis de obras y unos 500 despidos. Se los adjudicó a empresas que esperan conocer el impacto de las medidas económicas y las destinadas al sector energético en la administración nacional entrante.

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