La producción local y sustitución de importaciones
El Gasoducto Néstor Kirchner espera las plantas compresoras pero ya genera un ahorro de US$ 10 millones diarios
Vaca Muerta sustituye más importaciones desde la habilitación del Gasoducto Néstor Kirchner. Cuáles son las obras pendientes que permitirán completar su aporte al sistema.
El Gasoducto Presidente Néstor Kircher tiene aún en desarrollo la construcción de las plantas compresoras en las cabeceras del Tramo I en Tratayen y Salliqueló, las cuales deberán estar inauguradas antes de fin de año para casi duplicar su capacidad de transporte, aunque ya está permitiendo un ahorro de 10 millones de dólares diarios por sustitución de importaciones.
Es que la habilitación del ducto y su conexión el Neuba II, en el centro oeste bonaerense, permite desde los primeros días de agosto un flujo adicional de 11 millones de metros cúbicos diarios (MMm3/d) del shale gas de Vaca Muerta hacia el conglomerado bonaerense. Desde entonces, la mayor disponibilidad de gas no sólo le permitió a la provincia de Neuquén romper el récord de producción por sobre los 100 MMm3/d, sino sustituir en el sistema la necesidad de Gas Natural Licuado (GNL) y de combustibles líquidos por un monto estimado en US$ 10 millones, de acuerdo a la empresa Energía Argentina (Enarsa).
Pero todas las cifras de incremento producción en el no convencional neuquino y de sustitución de importaciones se podrán acelerar en los próximos meses cuando entren en operación, antes de fin de año aseguran, las dos plantas compresoras de 30.000 hp actualmente en construcción. La primera de ellas en la planta neuquina de Tratayen, cabecera del GPNK, y la otra en el extremo opuesto en la planta Saturno, en el partido bonaerense de Salliqueló, lo que llevará la capacidad a 21 MMm3/d. En esa línea se dieron las licitaciones de carga del Plan Gas, que permitió proyectar más metros cúbicos a partir de enero y de mayo de 2024, para fortalecer la oferta en el pico de demanda de los meses de invierno para los cuales ya no estará el buque regasificador de Bahía Blanca.
El Tramo I de 573 kilómetros del GPNK contará a futuro con nuevas plantas compresoras, de manera de volver a ampliar su capacidad de transporte para poder abastecer no sólo al Neuba II sino al futuro ducto del Tramo II. Se trata de la construcción y provisión de 4 turbocompresores en la traza del gasoducto: dos adicionales a las de Tratayén y Salliqueló y dos nuevas a la altura de Chacharramendi, que ya cuenta con el financiamiento del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) que días atrás aprobó un crédito de US$185 millones. Esto permitirá incrementar la capacidad de transporte en 9,5 millones de metros cúbicos por día.
En tanto, es inminente la salida de la licitación internacional para la adquisición de los caños para los 524 kilómetros del Tramo II del GPNK, para la cual hay varios consorcios interesados entre ellos Techint que con su subsidiaria brasileña Usiminas buscará ser protagonista de la obra, aunque esta vez estará en condiciones de aportar el financiamiento que ya fue comprometido por el Banco Nacional de Desarrollo de Brasil. La Secretaría de Energía, también recibió manifestaciones de interés para participar de parte de un consorcio chino y otro saudí, también con sus patas financieras, lo que marcará la diferencia con el primer desarrollo que fue solventado por el Estado.
La Etapa II -que tendrá un costo aproximado de unos US$ 3.200 millones- permitirá complementar una traza de 1.097 kilómetros para llevar el gas de Vaca Muerta hasta la localidad de San Jerónimo, al sur de la provincia de Santa Fé, un punto nodal del sistema ya que allí convergen distintos gasoductos. De hecho desde allí se podrá proyectar no sólo el abastecimiento a todas las provincias del Litoral a través del Gasoducto del Noreste Argentino (GNEA), sino buscar la conexión más conveniente para llegar a los cordones industriales del sur de Brasil, en particular de la ciudad de Porto Alegre.
