Buscan reactivar con China una nueva termoeléctrica que costará US$ 1.100 millones

La empresa estatal Energía Argentina y la constructora privada Eling Energía buscan retomar y avanzar en el financiamiento de un banco chino para la futura Central Termoeléctrica Manuel Belgrano II (conocida como CTMB2), una obra que tendrá un costo estimado en los US$ 1.100 millones y que podría aportar con su reingeniería unos 900 Mw de energía más eficiente al sistema.

Fuentes al tanto de las negociaciones señalaron que se buscan recrear las condiciones del proyecto que originalmente estaría financiado al 85% por el Export-Import Bank of China (Exim Bank), en el marco de la asociación estratégica integral que el Estado nacional acordó con la República Oriental de China.

Las dilaciones que el paquete de obras acordados con Beijing registraron desde 2015 hizo caer la vigencia del financiamiento propuesto y ahora en una nueva etapa de las relaciones se busca reflotar.

La expectativa está centrada en los avances que se registraron en el financiamiento correspondiente a la construcción de las dos centrales hidroeléctricas, sobre el Río Santa Cruz, el cual acaba de retomar el flujo de fondos por parte del pool de bancos chinos para una obra presupuestada en casi US$ 5.000 millones.

Pero, de no prosperar las tratativas que llevan adelante Energía Argentina y Eling -nueva denominación de la ex Electroingeniería- se empezó analizar la posibilidad de obtener un financiamiento mixto por parte de organismos regionales como el banco Interamericano de Desarrollo (BID) o el Banco de Desarrollo de América Latina – CAF, junto a agencias de inversión europeas, en particular de Alemania por la participación en el proyecto de la firma Siemens.

Energía Argentina es la propietaria del proyecto, pero Eling es responsable de la construcción, suministro, montaje y puesta en servicio de la CTMB2, para la cual está previsto que la estación incluya dos turbinas de gas y una turbina de vapor, y una línea de transmisión de 500 kV conectará la planta con la red nacional y una estación transformadora. Aprobada inicialmente bajo el segundo gobierno de Cristina Kirchner, la planta fue uno de los seis proyectos cuya construcción luego quedó congelada bajo la administración de Mauricio Macri.

El Gobierno comenzó en 2021 la negociación para restablecer y modificar el contrato de línea de crédito para dos de los seis proyectos (las represas Jorge Cepernic y Néstor Kirchner), planteando la posibilidad de que Manuel Belgrano II y los otros proyectos también podrían reactivarse.

El proyecto retomó impulso ante la necesidad de incrementar la oferta en el parque de generación con una central eficiente que permita mayor seguridad energética ante las experiencias de los últimos dos años con un sistema casi al límite. Pero a la vez, la CT ofrece la posibilidad de reemplazar unidades más antiguas y casi obsoletas, de mayor costo de mantenimiento, mayor costo de generación y menor eficiencia.

La central será la melliza de la Termoeléctrica Manuel Belgrano I, la que ya se encuentra en operación en el mismo predio, desde 2009. Esta unidad de generación de ciclo combinado fue adjudicada por licitación internacional a las empresas Siemens Power Generation, Duro Felguera (España) y Soluciones Energéticas Argentina, (ésta última integrada por Duro Felguera y Construcciones Argentina del Grupo Eling Energía).

El ciclo combinado es de 837 Mw compuesto por dos grupos de gas de 279 Mw cada uno más un turbo grupo de vapor de 279 Mw, y pueden funcionar alternativamente con fuel oil. Para la futura obra, se celebró un acuerdo de UTE con la empresa china China Nacional de Importación y Exportación Técnica Corporation (CNTIC), la que proveerá los principales equipos de generación, mientras que EISA tendrá a cargo la provisión del resto de materiales, todas las obras civiles, electromecánicas y puesta en marcha de la obra.

Se trata, en este caso, de un Ciclo Combinado de 810 Mw tipo 2x1 (dos turbinas de gas y turbina de vapor) que con la actualización tecnológica de la proveedora de los equipos podrá escalar hasta los 900 Mw de generación.

El proyecto permite utilizar los mismos gasoductos, acueductos y vertederos de su predecesora, mientras que el sistema de desmineralización del agua ya se encuentra montado y en funcionamiento, explicaron las fuentes, al resaltar que las obras darían trabajo a unas 1.000 personas y que en 17 meses se puede habilitar la generación con el ciclo abierto mientras concluyen los trabajos para completar el ciclo combinado en un plazo de 32 meses.

La historia del proyecto se remonta a la creación en 2004 del Fondo para Inversiones Necesarias que Permitan Incrementar la Oferta de Energía Eléctrica en el Mercado Mayorista (FONINVEMEM), del cual surgió la construcción de obras como las CT Manuel Belgrano y General San Martín, dos de las unidades más eficientes del sistema.

Ese fondo se conformó con aportes del Tesoro, financiamiento de la Anses y con las acreencias de los generadores privados, las cuales obtuvieron como compensación la participación accionaria.

Así, su composición accionaria quedó conformada por Energía Argentina con la representación mayoritaria del Estado nacional con el 65%, y los privados Central Puerto (10,8%), AES Argentina (7,1%), Enel Generación (6,2%), Pampa Energía (3,1%), y Orazul Energy (2,2%) entre las más representativas.