Entre el shale y el Presal, crece la producción de petróleo de Argentina y Brasil

Argentina es el país latinoamericano que más creció en su producción de petróleo entre 2019 y 2022: 4,7%. Si bien Brasil creció 2,7% en ese periodo, su gigantesca producción lo ubica en el puesto número uno en América Latina, desplazando a México y a Venezuela. ¿Cuáles son las claves de Argentina y Brasil para alcanzar estos inidicadores?.

Un informe de Economía & Energía, la consultora de Nicolás Arceo, da cuenta de los números, el contexto y las proyecciones de Argentina y Brasil en un escenario global de mayor demanda de energía. Sobre la base de datos de agencias internacionales, E&E destaca que hacia 2022 el ranking se establecía con Brasil (3,022 milllones de barriles por día), México (1,843 millones), Venezuela (704 mil), Colombia (752 mil), Argentina (582 mil), Ecuador (480 mil) y Guyana (276 mil).

"A partir de la década de 1990 la producción de petróleo en Brasil registró un fuerte impulso, llegando a ubicarse a lo largo de la última década como el principal productor de América Latina, superando a México y Venezuela", señala el informe. Y agrega: "De este modo, en 2022 la producción de petróleo en Brasil representó el 3,7% del total global y casi la mitad de lo producido en América del Sur y Central".

Argentina venía decayendo su curva de producción desde 2014, pero a partir de 2019 comenzó a crecer, y a pesar del paro del 2020 por el Covid. Todo de la mano de Vaca Muerta y su shale oil, y tras la reorientación de los objetivos de YPF en 2012 con su reestatización. El shale oil ya representa el 50% de la producción argentina y ubicándose exclusivamente en los proyectos con objetivo en al roca shale en al provincia de Neuquén.

Vale destacar que la Argentina en octubre de 2023 alcanzó una producción petrolera de 668 mil barriles por día, lo que la mantendría en el Top 5 y pronto podría ascender.

¿Qué pasó en Brasil? Según E&E: "Este crecimiento de la producción se sostuvo en la última década a través del impulso de la producción offshore y, en particular, del Presal. En este sentido, el estado de Río de Janeiro concentra en la actualidad la gran mayoría de la producción (85% del total)".

Desde 2010 los proyectos en el Presal, aquellas capas geológicas ricas en hdirocarburos en el mar profundo, Brasil logró compensar el declino de su tradicional producción offshore. A la fecha, este tipo de explotación representa el 76% de la producción total brasileña y llega a los 2,5 millones de barriles por día, y el país exporta el 47% del crudo que produce.

En Brasil los precios locales del crudo se alinearon a los internacionales como parte de las medidas para incentivar la inversión extranjera. "La brecha respecto a los precios vigentes en el mercado internacional (Brent) desde comienzos de siglo promedió los 9 usd/bbl, proceso que contrasta con lo acontecido en la Argentina, en donde dicha brecha superó los 20 usd/bbl en idéntico período", compara el informe coordinado por Arceo.

En Argentina, la producción en octubre pasado llegó a los 668,4 mil barriles por día. El convencional tuvo una caída del 3,3% mientras que el no convencional, expresada principalmente la actividad Vaca Muerta, creció un 20,1% y llegando a los 323,4 mil barriles diarios. Las principales productoras del shale oil argentino son YPF (194,9 mil barriles), Vista (48,6 mil), Shell (23,8) y PAE (39,7).

Con estos números, ambos países tienen una proyección alentadora para ubicarse en el mapa global de productores hidrocarburíferos. Pero más todavía una fuerte integración, como se viene hablando para llevar producción de shale gas desde Argentina al sur de Brasil o traer electricidad brasileña a la Argentina, compensando inesperadas subidas o bajadas de la demanda o de los precios internacionales.