Vaca Muerta en la era del ajuste y la macro estragada

Dos fotos contrastan en las últimas horas de la doble transición política. Por un lado, algunos de los mejores indicadores de producción en la historia de Vaca Muerta e inversiones en torno a los 7600 millones de dólares en el 2023, que implican un récord en la década de los no convencionales en Argentina. Una suma de las grandes, incluso para los parámetros de la provincia de Neuquén. La producción de gas permitió este año al Estado nacional evitar una pesadilla mayor en concepto de importaciones. Todavía queda por verse, pero las obras de infraestructura de transporte hacia el norte colocarían al país como proveedor estratégico del Cono Sur. Es casi una invitación que hacen las diferentes versiones de los gobiernos chilenos, brasileños y bolivianos. En los últimos cinco años se mostraron pragmáticos a la hora de buscar soluciones, por más grietas que se les impusieran. Es lo que explica que Jair Bolsonaro, primero y Luis Inacio Da Silva, ahora, miren el gas de Vaca Muerta como una solución, pese a las controversias de turno con sus pares argentinos (Alberto Fernández y a continuación Javier Milei).

En esa línea de crecimiento, la producción de crudo permitirá un nuevo salto en el último mes del año. En la gestión saliente sostienen que alcanzará por encima de los 360 mil barriles diarios de crudo y que, al margen del imponderable político nacional en medio de la profunda crisis económica, social y política en la que asumirá Javier Milei este domingo, en el 2024, los niveles de inversión podrían ser similares a los del año que está finalizando. Si la recesión se profundiza, como enfatiza el gobierno nacional entrante, asoman los oleoductos vinculados al frente externo como variable para paliar una parte del impacto ante un eventual estancamiento de la demanda local. La contraposición es cruenta. Pero explica el modo y los cálculos que se hacen en algunos despachos del sector privado y el público en Neuquén y Buenos Aires. Con todo, una estimación conservadora, como la del presupuesto provincial 2024, establece una hoja de ruta con una producción en torno a los 422 mil barriles diarios en promedio para el año próximo.

Por otro lado, la otra foto: el contexto político y social en la provincia que administra las concesiones no convencionales de Vaca Muerta, a horas del fin del segundo mandato de Omar Gutiérrez.

En Neuquén el escenario económico, ese mix de oportunidades, realidades y desigualdades, tiene una situación-metáfora recurrente en los últimos tres años. Hoy hace foco en las 25 familias que llegan a buscar trabajo todos los días a la provincia. Sucede que las chances no están para todos. Ese imán que también es Vaca Muerta tiene como contraste a intendentes pagando de su bolsillo pasajes de vuelta. En parte así, evitan nuevos asentamientos, como los que están coronando el proceso de crecimiento de Añelo, cuya Municipalidad hasta hace un puñado de años estaba construida de madera y donde los nuevos habitantes cortan rutas para reclamar servicios.

Al mismo tiempo, ese vector de atracción -la industria no convencional- forma parte del desvelo de los próximos años para las autoridades entrantes. Por lo bueno, y por lo no tanto o directamente malo. En rigor, fue parte sustancial de la comunicación del gobernador electo Rolando Figueroa, que hizo de la crítica a la falta de escuelas, las rutas históricamente sin asfalto, y las carencias en las redes de gas domiciliario en la segunda reserva de gas no convencional del mundo, un estímulo para ese vector que caracterizó buena parte de lo que ocurrió después en las urnas de todo el país: el “cambio”, expresado a través del voto bronca de miles en la provincia y millones en el país que lo pasan muy mal. El paso a la gestión implicará la necesidad de respuestas y una optimización de los recursos con los que contará en los próximos cuatro años. 

En el 2024, como ya se informó, Neuquén tendrá un presupuesto récord. La cifra de 2,06 billones de pesos incluye otra nueva marca: la masa salarial. Neuquén tiene comprometidos más de 1 billón de pesos en estos recursos. El gobierno recibe una actualización salarial atada a un combo de indicadores inflacionarios. La inflación creciente de dos dígitos mensuales con presión sobre los fondos públicos, y los compromisos de deuda forman parte del contexto en el que asumirá. Se suma a la incógnita sobre la próxima política macroeconómica y sus efectos en el sector energético, como parte del interrogante para definir los niveles de ingresos del corto y mediano plazo.

Milei promete precios liberados en toda la economía. Unas 48 horas antes de asumir, el valor de la nafta dio un salto del 30%. El escalonamiento no tiene antecedentes en los últimos años. La gestión nacional entrante, afirma, tenderá a un salto en el tipo de cambio oficial. La liberación del precio de los combustibles podría actuar como aliciente para la obtención de más regalías en las provincias productoras de hidrocarburos. Pero queda por ver qué implica en términos de actividad económica (y los efectos en la recaudación provincial y federal), para tener una imagen más clara respecto de los recursos con los que contará la provincia y cómo eso permitirá mayores márgenes de maniobra ante un contexto social crítico. Parte de los equipos ministeriales del gobierno entrante en la provincia se plantean estas preguntas, al mismo tiempo que comenzaban a tomar conocimiento del cuadro de situación económico que recibirán en la extensa transición neuquina que se remonta a abril pasado.

Medele, el nuevo ministro de Energía

Figueroa se reservó hasta último momento el nombre del ministro de Energía y Recursos Naturales que integrará a su gobierno. Tal como lo hizo en la etapa previa con el resto de su equipo de gobierno, lo anunció a través de sus redes sociales: Gustavo Medele quedará a cargo de una cartera central en la política provincial. Así abrirá un nuevo ciclo, luego de seis años con Alejandro Monteiro durante buena parte de los dos gobiernos de Omar Gutiérrez.

A nivel nacional, en la previa de su asunción en la Casa Rosada, Javier Milei introdujo una modificación. La secretaría de Energía que conduce Eduardo Rodríguez Chirillo pasará a la órbita del ministerio de Economía que conducirá Luis Caputto, lo que permitiría la coordinación de la próxima política tarifaria, explican las funtes consultadas en LLA.