En la siderurgia, la cal es clave para la elaboración de "acero verde"

La siderurgia, la técnica del tratamiento del mineral de hierro para obtener distintos productos como el acero, está empleando la cal como insumo indispensable para su actividad. Además, es fundamental para el desarrollo de un "acero verde" que es producido en un contexto bajo en emisiones de carbono.

La calidad y la cantidad de cal utilizada tiene un efecto directo en la calidad de la escoria, que afecta a los resultados metalúrgicos, la vida del refractario de los hornos, el rendimiento del metal líquido y la productividad. Por todo esto, la implicancia que tiene la cal en el costo total de la producción de acero va mucho más allá de su costo como materia prima.

"Sabemos que sin la cal, la industria del acero no funciona. La cal y la caliza son dos elementos que están presentes en toda la cadena productiva del acero", asegura Laura Correa, gerente de investigación y desarrollo de Grupo Calidra, compañía que opera en Argentina y Chile

Si bien está lejo de Brasil y China, que producen el 60% del acero mundial, la Argentina tiene una larga historia siderúrgica y cuenta con empresas referentes a nivel global, sobre todo en la producción de tubos sin costura, clave para industrias como la del petróleo y el gas.

Hay seis grandes acereras en el país: Ternium Siderar, Tenaris Siderca, Acindar, Sipar Gerdau, Acerbrag y Aceros Zapla. La capacidad instalada en Argentina es de 7 millones de toneladas de acero crudo por año y 109 mil trabajadores dependen del sector de manera directa e indirecta.

¿Por qué se habla de "acero verde"?. La producción de acero representa entre el 7% y el 8% de las emisiones de carbono en el mundo, por lo que la industria apunta a modelos innovadores de descarbonización. "Nosotros acompañamos la tendencia mundial de la reducción de huella de carbono utilizando exclusivamente hornos de alta tecnología y fuentes de energía bajas en azufre", agregó Correa.

Grupo Calidra es uno de los principales proveedores de la cal que consume la industria siderúrgica argentina, que ronda las 14 mil toneladas mensuales. La cal es un agente fundente que colabora con la formación de escoria y con la eliminación de impurezas como el azufre, la sílice y el fósforo. La cal también se utiliza para mejorar la productividad en el proceso de aglomeración del mineral.

Por su parte, Ivan Orozco, Gerente Comercial de Calindra, explicó: "El acero verde es un acero que teóricamente tiene una emisión de CO2 neutra. Sucede porque se usan otros sistemas de producción, hay mucho agregado de hidrógeno como fuente de energía. Pero nosotros, como proveedores, también aportamos a esa reducción de la huella de carbono. Al usar tecnología de última generación y consumir energías eléctricas renovables, bajamos la huella de carbono del consumidor de nuestra cal".

El gas natural como principal fuente de la matriz energética en la Argentina colabora con la descarbonización de la siderúrgia. "No es lo mismo una usina térmica que funcione a carbón para suministrar energía eléctrica a una acería eléctrica, que una usina que funciona a gas. En este proceso es donde vemos reflejada la disminución de emisiones de CO2", dijo Correa.

La cal es utilizada durante toda la cadena de elaboración del acero, insumo adecuado para la eliminación de impurezas. "La cal cálcica y la cal dolomítica forman parte de este proceso de purificación que se produce por un delicado equilibrio químico en la interfase, entre el acero fundido y la escoria que convive con él, sobrenadando sobre el espejo del metal fundido", describió Correa.