El plan de Y-TEC en La Plata

La primera fábrica de baterías de litio del país "ya está funcionando" y tiene fecha de inauguración

Al complejo de Y-TEC le restan detalles de la obra civil. Se abre la etapa de escalado de producción de la tecnología desarrollada, con la búsqueda de inversores internacionales y la definición del modelo de negocios.

 La primera fábrica de baterías de litio del país "ya está funcionando" y tiene fecha de inauguración
Una sala de la planta de Y-TEC en La Plata.
Una sala de la planta de Y-TEC en La Plata.

La fábrica de baterías de litio que Y-TEC desarrolló junto a la Universidad de La Plata ya está funcionando pero recién será inaugurada el 16 de enero, cuando finalicen detalles de la obra civil, según adelantó Roberto Salvarezza, presidente de la compañía de investigación y desarrollo.

Se trata de la primera fábrica de baterías de litio que se emplazó en la ciudad de La Plata que tendrá capacidad de 15 Mw hora al año, equivalente a lo necesario para abastecer de energía hasta 2.500 viviendas y 400 vehículos eléctricos. Pero a esa planta se sumará una en construcción en Santiago del Estero, que es cinco veces más grande con una capacidad de 75 Mw.

Denominada UniLiB, la primera planta de desarrollo tecnológico de celdas y baterías de ion litio de la Argentina -ubicada en el Centro de Innovación y Transferencia Tecnológica que la UNLP- es un emprendimiento inédito en el país que busca desarrollar toda la cadena de valor  del abundante recurso mineral con que cuenta la Argentina y que será clave para la electromovilidad y el desarrollo de las renovables.

Salvarezza, al participar del encuentro anual de la Cámara de Energías Renovables, en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, reveló que “la planta de fabricación de celdas de baterías de litio está terminada: Se han puesto en marcha los equipos y todo funciona como se esperaba, pero la inauguración prevista para octubre tuvo una demora en la obra civil, a la que le falta terminar los ductos que conectan la salas limpias con los equipos de baja humedad, vacío y nitrógeno, por lo que va a ser inaugurada para el 16 de enero”.

Esta puesta en marcha es un paso central pensando en los recursos de almacenamiento energético a partir del litio en el contexto del aprovechamiento e industrialización de los recursos mineros para abastecer la demanda futura de la transición energética.

Para Salvarezza, la Argentina en 2024 tendrá una capacidad de almacenamiento de 100 Mw, pero la proyección a 2030, es que el país debería tener una capacidad de 1,2 Gw solo para atender la demanda estacionaria de energías renovables solar y eólica, y si se extiende el compromiso asumido en vehículos eléctricos se amplía a 25Gw para finales de la década.

“El gran desafío es cómo plantearse un escalado de esta capacidad, donde ya conocemos toda la tecnología y la integración nacional que puede haber, y ser tiempistas para incrementar con algún socio internacional la producción de las celdas, pero a su vez tener un off-stacker -que financia y toma su resultado- que nos permita que la inversión para una planta de envergadura sea sostenida mientras va creciendo el mercado nacional y latinoamericano”, explicó el titular de Y-TEC.

En esa búsqueda de socios, Salvarezza aseguró que “hay muchas empresas interesadas, que quieren venir al país para aprovechar esta decisión de industrializar el recurso: Unos que ponen la inversión, hacer el material del electrodo pero requieren que se les garanticen nuevos mercados porque ya tienen capturado el mercado internacional, y otros que quieren todo para exportar”.

“Ese juego es una decisión fundamental, es una discusión que permitiría hacer la curva de aprendizaje mucho más rápida, y que no significa decidir entre mercado local o externo porque se pueden hacer las dos cosas”, aseguró el ex ministro de Ciencia y Tecnología al explicar que para generar capacidad de almacenamiento por 10Gw se necesitan 10.000 toneladas de carbonato de litio y la previsión de producción al 2025 es de 250.000 toneladas, lo que “evita todo debate posible entre industrialización o exportación”.

La planta industrial que se pondrá en marcha formalmente en enero focalizará el destino de su producción en abastecer las demandas de insumos de los socios que conforman el proyecto, para el almacenamiento de energía solar en poblaciones offgrid de la provincia de Buenos Aires, para uso de las Fuerzas Armadas y en vehículos eléctricos. A su vez se estará  transfiriendo la tecnología a las provincias que proyecten instalar una planta similar para almacenamiento como la de Santiago del Estero.

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