El futuro del abastecimiento en la región
Bolivia: cómo es el contexto de la caída de la producción
De no revertir el declino de sus yacimientos, el país vecino podría dejar de exportar gas natural a Argentina en 2033 y a Brasil en 2040.
Frente al incremento de la demanda de gas natural en la región y las compras de un LNG con precios exorbitantes, Argentina y Brasil se disputan un gas boliviano cada vez más escaso, cuya producción está declinando a un ritmo de entre 3% y 3.5% anual.
En términos reales, y según los datos de la consultora Gas Energy Latín América, la producción de gas ha caído de 61 MMm3/d en 2014, a un total de 42 MMm3/d en 2021. Con reservas descubiertas hace 25 años atrás, Bolivia ha venido exportando a Brasil hace 21 años y hace 8 al mercado argentino.
Sin embargo, el declino de la producción de gas del país vecino dificultó el cumplimento de los compromisos asumidos en estos contratos.
Bolivia exporta diariamente 14 MMm3/d de gas a Argentina y 20 MMm3/d a Brasil, y el consumo interno llega a 14 MMm3d, haciendo un total de 48 MMm3d, cifra que excede la producción nacional, que es de 47 MMm3d.
En este contexto, Vaca Muerta, a través del salto de productividad que ha dado en los últimos años y del impulso del sector privado y público con inversiones que potenciarían la producción y la posibilidad de exportación, podría suministrar gas a toda la región.
En Bolivia la preocupación no es menor. A principios de este año el gobierno boliviano prometió inversiones para este año por más de $1500 millones para fortalecer el sector energético, con obras de generación, transmisión y electrificación, nuevas exploraciones de hidrocarburos; y apuntalar la industrialización del litio.
El propio ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina Ortiz, dijo que “este año ha sido denominado el año de la exploración y hemos contemplado importantes inversiones en esta área, pero también vamos a desarrollar otros proyectos para toda la cadena hidrocarburífera".
No obstante, Bolivia no logra recuperar sus actividad exploratoria y según dicen los expertos, el problema no sería geológico, sino que estaría enquistado en el diseño de su política energética.
El economista y ex ministro de Hidrocarburos Mauricio Medinaceli, advirtió que "ante la baja de la producción de gas y a pesar de los proyectos de exploración, Bolivia podría dejar de exportar el combustible a Argentina en 2033 y a Brasil en 2040".
En la presentación de su informe “Breve análisis y prospectiva de la industria del gas natural boliviano: 1980-2021”, el especialista realizó la prospectiva con la información de las reservas probadas, probables y los nuevos proyectos en el sector de hidrocarburos.
"Con esos datos, Bolivia podría sostener un nivel de producción igual o mayor a 50 MMm3/d hasta 2028. Luego, se activa una declinación natural de los campos", explicó Medinaceli en su informe.
“Aún con los nuevos proyectos de exploración, para 2033 ya no podremos enviar volúmenes de gas a Argentina y a Brasil en 2040. Las exportaciones, aún con los nuevos proyectos, caerán a cero. Por eso urgen reformas porque esta es la situación”, dijo.
Desde 2015 que la producción de gas del país cae debido a que el Gobierno destinó mayor inversión a la explotación que a la exploración. La mitad del crecimiento del PIB de Bolivia, de los últimos 15 años, se debe a la venta de gas a Brasil.
"No se puede entender la economía boliviana tal y como es ahora sin ese proyecto de exportación de gas", afirmó.
Hacia adelante el escenario es complejo y para revertir la actual situación se barajan algunas posibilidades, tales como: eliminar gradualmente los subsidios en el mercado interno; implementar cambios en YPFB; incentivo a las exploraciones; y sancionar una nueva ley de hidrocarburos, entre otras.
