Las fracturas en los bloques no convencionales

La falta de transporte y la salida del invierno impactan en el fracking de Vaca Muerta

Hubo una caída del 28 por ciento en la cantidad de punciones realizadas en septiembre.

La falta de transporte y la salida del invierno impactan en el fracking de Vaca Muerta
Un set de fracturas en la formación Vaca Muerta.
Un set de fracturas en la formación Vaca Muerta.

Vaca Muerta está alcanzando sus mejores marcas históricas de producción de petróleo y gas, pero la salida del ciclo de bajas temperaturas y la falta de transporte para el crudo dieron de lleno en la culminación de pozos shale en el último mes.

Este escenario implicó una caída en los niveles de fracturas en septiembre, cuando se totalizaron 975, de acuerdo al informe que realiza la empresa NCS Multistage conducida en Argentina por Luciano Fucello.

Vaca Muerta había plasmado un récord histórico en agosto, al alcanzar las 1385 punciones en los pozos no convencionales de la Cuenca Neuquina, donde se encuentran los principales desarrollos de shale del mundo por fuera de Estados Unidos y  Canadá.

El despegue a niveles nunca registrados estuvo dado desde finales del año pasado por dos puntos centrales: por un lado, la necesidad de completar pozos de shale gas para complementar con producción doméstica las importaciones de GNL, cuyo precio récord es una presión adicional para la golpeada macroeconomía de Argentina.

Y al mismo tiempo, los campos productores de shale oil mostraron su máxima expresión para abastecer la demanda doméstica y seguir encontrando oportunidades en el exterior, en un contexto de elevados precios por encima de la medida local.

Pero este escenario entra en un ciclo en el que el petróleo, para crecer, requiere de más capacidad de transporte en el principal Oleoducto (Oldelval) de la Cuenca Neuquina, cuya obra que duplicará la capacidad actual de evacuación, según el gobierno provincial, se inicia este mes.

En el caso del gas, Argentina ingresa en el ciclo de altas temperaturas, el período que coincide con la baja estacional de los bombeos, que funcionan al máximo en los meses que van de mayo a septiembre.

Vaca Muerta venía de crecimientos sucesivos en los tres últimos meses: junio (1094 fracturas), julio (1307) y agosto (1392). Se trata del lapso en el que se registró la mayor producción no convencional de petróleo y la mayor de gas en todas sus expresiones (convencional y no convencional) de la historia de Neuquén (91,3 MMm3/d).

En septiembre, el siguiente fue top tres de las punciones en Vaca Muerta: YPF encabezó el ránking de las fracturas con 538; Tecpetrol acumuló 164 etapas. En tercer lugar se ubicó Vista con 157 etapas.

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