Acuerdo entre Enarsa y Petrobras
Argentina y Brasil aseguran el abastecimiento del gas del NOA
Será hasta tanto entre en operación la reversión del Gasoducto del Norte. El suministro se podrá garantizar con el gas adicional a los 5 millones de metros cúbicos que venía entregando Bolivia, que se pueda liberar de los contratos con Brasil que atraviesa una temporada de fuerte hidraulicidad.
Los gobiernos de la Argentina y de Brasil anunciaron hoy un acuerdo por el cual, a través de sus compañías de energía, comprometen avanzar en la búsqueda de los mecanismos necesarios para asegurar el abastecimiento de gas natural para las provincias del Noroeste Argentino, hasta tanto entre en operación la reversión del Gasoducto del Norte.
El avance se concretó mediante la firma de un memorándum de entendimiento que firmaron en Río de Janeiro las empresas Energía Argentina (Enarsa) y Petrobras, el cual tendrá una vigencia por los próximos tres años con diferentes propósitos de cooperación mutua.
La firma del acuerdo se concretó el jueves 18 en la ciudad de Río de Janeiro y de acuerdo a lo comunicado por las dos empresas “le permitirá a Enarsa solucionar el abastecimiento de gas del NOA mientras se finalizan las obras recientemente licitadas de reversión del Gasoducto Norte”, un tema clave que se encontraba pendiente de rápida resolución.
Si bien aún no se oficializó la idea, lo que se venía discutiendo a nivel técnico y gubernamental, es que Brasil durante los próximos meses pueda resignar parte de las importaciones de gas natural de Bolivia ya contractualizadas, para que esos volúmenes puedan ser redireccionados hacia la Argentina en el pico de demanda invernal.
Esa necesidad del país para abastecer a las siete provincias norteñas se produce a partir de lo comunicado ya en 2023 por las autoridades de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) de que no sólo podría aumentar los volúmenes de gas para este 2024, sino que a partir de junio tampoco podría asegurar el abastecimiento en firme.
Esa inestabilidad de abastecimiento, sumado a que las obras de reversión del Gasoducto del Norte se demoraron en el traspaso de Gobierno y no llegaron a estar concluidas para abril, obligó a revisar las alternativas de suministro.
Hoy el abastecimiento del Norte se podrá garantizar con el gas adicional a los 5 millones de metros cúbicos que venía entregando Bolivia, que se pueda liberar de los contratos con Brasil que atraviesa una temporada de fuerte hidraulicidad en sus represas que le permite cierta holgura energética.
El acuerdo, a su vez, posibilitará el intercambio de información, identificación y estudio de viabilidad de las diferentes alternativas, acciones y mecanismos de mediano y largo plazo para cooperación y complementariedad energética entre Petrobras y Enarsa.
En ocasión de la firma, el presidente de Energía Argentina, Juan Carlos Doncel Jones, recalcó la importancia que reviste este acuerdo en la coyuntura que enfrenta el abastecimiento de gas en la región NOA durante la transición que posibilite el abastecimiento desde los yacimientos de Vaca Muerta.
A su vez, el representante de Petrobras destacó el valor estratégico que significa la integración regional y de países hermanos. Precisamente, fuentes vinculadas al diálogo explicaron que el entendimiento permitirá avanzar de manera conjunta en el estudio de las alternativas más convenientes que permitan llevar el shale gas neuqino a los centros industriales de Brasil.
El principal socio comercial viene ratificando en los últimos años su interés en contar con la producción de Vaca Muerta para apuntalar su integración a la matriz energética.
El gasoducto troncal del norte es un gasoducto operativo desde 1960 que transporta gas desde Campo Durán (Salta) hasta San Jerónimo (Santa Fe). El gasoducto tiene una longitud de 1.454 kilómetros y se orienta de norte a sur, y en 2023 comenzó el proceso de reversión que permitirá sustituir por completo el gas que se importa desde Bolivia.
Para esto, Enarsa avanzó con la licitación de obra en distintos tramos. Por un lago adjudicó la producción de los casi 200 kilómetros de caños a Tenaris-Siat; la construcción del Gasoducto de Integración Federal a la UTE Techint-Sacde y de los loops y parte final del gasoducto a BTU, y más recientemente la reversión de cuatro plantas compresoras a Esuco. El ajustado cronograma prevé que la obra esté finalizada en septiembre.
