Figueroa y Weretilneck plantearon una vía institucional para resolver diferencias con Nación

Para evitar una escalada en el conflicto entre las provincias y el gobierno nacional, los gobernadores de Río Negro y Neuquén, Alberto Weretilneck y Rolando Figueroa respectivamente, propusieron reabrir el diálogo y fortalecer las vías institucionales. Todo esto después del fuerte cruce entre el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, y el presidente Javier Milei por el recorte de fondos y la advertencia de frenar la producción de petróleo y gas desde esa provincia.

"El diálogo es el camino, tenemos instancias que nos da la democracia como el Congreso de la Nación y la Justicia", afirmó Figueroa en una rueda de prensa. No obstante, manifestó: "No permitimos nunca que de alguna forma se ahogue a algún compañero gobernador".

"Para nosotros producir es muy importante. Nos genera valor agregado, genera trabajo y extraer el gas y el petróleo nos lleva a ser muy coherentes a la hora de mostrarnos al mundo para atraer inversiones y seguir otorgando una seguridad jurídica", explicó Figueroa.

Es en ese sentido que los gobernadores, que participaron de la inauguración del nuevo edificio de la Secretaría de Energía de Río Negro, expresaron como consigna "Diálogo, Congreso y Justicia".

"Hay que entender que esta crisis no fue producto de las administraciones provinciales. Nosotros provenimos de dos fuerzas provinciales, por lo que no tenemos nada que ver en cuanto a la inflación y a la deuda, pero si estamos dispuestos a trabajar", expresó el titualar del ejecutivo neuquino.

Figueroa añadió que tanto su gestión como la de Weretilneck están buscando el ordenamiento de las finanzas públicas y tomando decisiones para administrar los recursos ante los problemas económicos existentes. Es así que recordó el acuerdo de gobernabilidad con los intendentes de Neuquén en Chos Malal. 

"Tenemos que prepararnos para una sequía absoluta de políticas nacionales. Tenemos que levantar la voz por nuestra gente", agregó Weretilneck. "En lo personal soy pesimista. Creo que hay actitud deliberada de romper puentes, ahora la responsabilidad nuestra es no hacer lugar a ese juego", añadió.

"La política económica del presidente la decide él y no nos tenemos que olvidar que lo votó una mayoría importante. Ahora, el 'déficit cero' tiene consecuencis en la gente, no es un agravio a los gobernadores. Cuando nos querían sacar la Zona Fría iba a significar un aumento exponencial en la tarifa del gas en toda la Patagonia con el gas que nosotros producimos y se pudo frenar en el Congreso. El 'déficit cero' tiene impacto humano, no es un ataque a los gobernadores", se explayó Weretilneck.