Alvaro Ríos Roca: "Con Vaca Muerta, Argentina será el nuevo proveedor energético en la región"

El escenario energético regional hoy marca un cambio de rumbo. La caída de la producción del gas boliviano y el protagonismo de Vaca Muerta parecen comenzar a imponer un nuevo paradigma en el mapa de abastecimiento en el Cono Sur.

En diálogo con Mejor Energía TV, el ex ministro de Hidrocarburos de Bolivia y actual socio director de Gas Energy Latin América, Alvaro Ríos Roca, sostuvo que "con el gas de Vaca Muerta, Argentina será el nuevo proveedor energético en la región".

"La caída de la producción de gas de Bolivia es preocupante. En 2014 rondaba los 63 MMm3/día y hoy apenas supera los 37 MMm3/día, lo cual implica una reducción del 6% anual", explicó.

Con estos números Ríos anticipó que "para 2029 Bolivia sólo podrá abastecer su mercado interno y cubrir una demanda de 13 MMm3/d en un escenario donde difícilmente se revierta esta tendencia ya que los últimos hallazgos de pozos no han dado resultados comerciales favorables".

En esta contexto, el ex funcionario y actual consultor afirmó que el protagonismo de Vaca Muerta es clave en la región, y aseveró que para 2035 Argentina estaría en condiciones de reemplazar a Bolivia como proveedor energético de una demanda que superaría los 63 MMm3/d. La misma incluye unos 14 MMm3/d en el norte argentino; otros 4 MMm3/d en el norte de Chile; la demanda potencial del litio boliviano y de otras industrias que llegarían a otros 12 MMm3/d; se agregan 6 MMm3/d hasta Cuiabá y más de 15 MMm3/d para atender al mercado brasileño y llegar hasta San Pablo.

"Todo esto aprovechando la infraestructura de gasoductos ya existentes con  la puesta en marcha del segundo tramo del Gasoducto Néstor Kirchner y revirtiendo el Gasoducto del Norte operado por TGN para alcanzar la frontera con Bolivia", describió.

Al respecto destacó la necesidad de acelerar las decisiones en materia regulatoria para avanzar con la concreción de todos los proyectos que permitirán monetizar las reservas de shale oil y shale gas de Vaca Muerta.

En otro orden de importancia, Alvaro Ríos también se refirió a lo que dejó el año 2022 en materia de precios y habló de las expectativas para este año.

"El año pasado fue muy duro para los países importadores de energía como el caso de Bolivia y Argentina que han pagado precios muy elevados. Bolivia no sólo importará gas en el corto plazo, actualmente compra el 72% del diesel y más del 50% de la gasolina que consume. Hacia adelante no se avizora un 2023 con precios bajos, y en cuanto al crudo nadie sabe lo que puede pasar en los próximos 5 años", concluyó.