Cumbre empresaria

Las petroleras hablaron de la falta de gasoil y el barril a u$s 70 

YPF hizo una convocatoria a todas las empresas. Los faltantes de crudo Escalante, exportaciones y acceso a divisas fueron parte de la agenda.

La falta de crudo pesado, clave de la refinación.

Las principales productoras de crudo de Argentina se reunieron a instancias de YPF para analizar una posible salida a los faltantes de gasoil en el mercado. Entre otros temas, se habló de la disponibilidad de petróleo Escalante, el hidrocarburo del segmento convencional atravesado por la declinación, que es fundamental para la producción de gasoil en el país, pero también del frente exportador y la posibilidad, todavía como hipótesis, de compensar a quienes destinen más crudo pesado al mercado local con un barril a 70 dólares.

Del encuentro participaron referentes de la empresa controlada por el Estado Argentino, también de PAE, Tecpetrol, Pluspetrol, Pampa, Chevron, Equinor, Vista, CGC, Raízen y Trafigura, entre otras empresas líderes de la producción y la refinación en el país.

El tema central fue la escasez de crudo pesado en el mercado interno y su efecto en la caída de la producción de gasoil. 

Las fuentes consultadas informaron que YPF sostuvo que le resta cubrir un cupo de entre 10 y 20% del petróleo pesado con el que produce parte del gasoil que luego provee a las estaciones de servicio. La compañía tiene el 57% del mercado de los cumbustibles en Argentina.

Para contrarrestar ese escenario, las alternativas no son muchas. Una de ellas es destinar cuotas crecientes de crudo Escalante, producido en el Golfo San Jorge y en la Cuenca Austral, para abastecer el mercado local. Esto implicaría que las empresas que lo exportan pudieran redireccionar su negocio y segundo conseguir al menos las condiciones de precio para el país que hay en el mundo.

Comprar gasoil en el exterior es una pésima opción. Las empresas que quisieron hacerlo para complementar sus ventas locales saben de lo ruinoso que puede ser.

El elevado precio internacional de los hidrocarburos presiona sobre la factura de cualquier derivado que se quiera importar. Los saben, por contraposición, las empresas que exportan: Mientras un barril de crudo se comercializa en torno a los 57/60 dólares en Argentina, aquellas productoras que logran exportar lo venden en la línea de los 100 dólares.

En la misma línea, el precio del gasoil importado tiene como parámetro ese barril cuyo paradigma en Argentina es el Brent, el crudo del Mar del Norte que fija la pauta para exportaciones e importaciones. Pero ese precio de un combustible importado no se está trasladando al mercado local (surtidores), ya que el gobierno argentino impone una ancla de precios a través de las ventas que realiza YPF.

El mercado del petróleo actual está caracterizado por la abundancia del crudo Medanito. Se trata del blend entre una mayor cantidad de shale oil (los diferentes tipos de crudo de los bloques de Vaca Muerta) y el viejo petróleo convencional de la Cuenca Neuquina. En buena medida, el proceso de inversiones -y la rentabilidad en los yacimientos y la abundancia del recurso- impuso esta característica al mercado petrolero en Argentina.

En ese contexto, coyunturas como la actual (mejores precios en el mundo y declinación de los campos convencionales del sur del país) vuelven a poner en escena el Escalante.

La discusión entre las empresas también quedó signada por la pregunta de quién, eventualmente, estaba dispuesta a relegar mejores ganancias en el exterior (en caso de exportar) y priorizar con su proporción de crudo al mercado doméstico, del cual YPF es el principal abastecedor de combustibles.

Como una eventual compensación para quien tomara esta última opción, en ese contexto se habló de la posibilidad de llevar el precio interno del barril de crudo a los 70 dólares, de acuerdo a lo que mencionaron fuentes vinculadas a la reunión. 

En ese punto, el dilema para el gobierno sería cómo evitar que un eventual mayor precio se trasladara a inflación, en un escenario en el que no está pudiendo dar respuestas a la aceleración de precios de toda la economía.  

Con todo, las petroleras y refinadoras siguen reclamado una actualización del precio en surtidores, luego del parate de más de 10 meses sin incrementos del año pasado, interrumpido por dos aumentos consecutivos en los dos últimos meses.

La otra pregunta es qué tanto podrían las petroleras atenuar con la producción local esos faltantes de crudo Escalante, el que se necesita para el gasoil. 

Por caso PAE, la otra gran productora de petróleo en el país, se prepara para dar un salto en el mercado de los combustibles. La firma se encuentra en una parada técnica en su planta de refinación en Campana, luego de la cual podría dar respuestas precisamente en este segmento de los combustibles. Al mismo tiempo, destinará el grueso de su producción de Escalante, el que produce en Chubut, al abastecimiento a su cadena de refinación.

Las otras productoras podrían dar respuestas de menor escala. Para algunas significaría romper contratos y priorizar la demanda interna (y llegado el caso venderle su crudo a YPF para que lo refine).

El acceso al mercado de cambios y la disponibilidad de divisas fue otro de los temas que se trató en ese encuentro. 

Las productoras de Vaca Muerta siguen de cerca esta variable de la economía Argentina. Vienen de exportar el 11 por ciento de la producción de petróleo de Neuquén el año pasado. Y podrían dar un salto significativo de la producción de shale oil también este año. Para eso será determinante contar con las obras de infraestructura necesarias que permitan salir del actual cuello de botella, la otra arista que tembién fue tema en la reunión.

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